Ser feliz otra vez

Y llega ese momento en el que piensas en cada uno de los momentos que pasaste a su lado, cada una de las tontas sonrisas que te hizo sacar, cada una de esas intensas miradas que os dirigisteis el uno al otro, cada suave roce de sus manos en tu piel, que te aceleraba locamente el corazón, esa felicidad que te invadía cada vez que pronunciaba tu nombre...

Y recuerdas que eso quedó atrás, que ya no está, que se ha ido. Y lloras, lloras mucho, tu corazón llora contigo, porque se niega a entenderlo. ¿Y lo que más duele? Que no fue nada. Que para él no fuiste nada, pero que él para ti lo fue todo. Y crees que por más tiempo que pase, nunca le podrás olvidar, que no se irá nunca de tu corazón, y por eso sufres. 

Y cuando el tiempo va pasando, te das cuenta de que has aprendido a vivir sin esa persona que llenaba cada uno de tus pensamientos. Te das cuenta de que la vida no es tan horrible aunque no esté a tu lado. Te das cuenta de que cuando oyes su nombre, ya no lloras, solo sonries, porque lo aceptas, así, sin más. En ese momento sabes que ya pasó, que estás preparado para ser feliz otra vez.